Al observar a las mujeres presentes día a día en mi entorno, sea cual sea su profesión, se aprecia la gran cantidad de responsabilidades que deben hacer frente tanto en el terreno profesional como en el doméstico y del hogar, relegando a un segundo plano momentos de ocio o de cuidado personal.
Para luchar por la igualdad y el reparto de responsabilidades en todos los ámbitos es imprescindible la educación.
Educar en valores de igualdad desde la escuela es la herramienta que nos ayudará a conseguir el cambio.
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No comprendo por qué estando en el Siglo XXI, todavía no se le da el lugar que merece la mujer. No lo concibo. Con poco sentido común, se puede uno dar cuenta que la tarea de la conservación de la especie recae sobre la mujer. Por ello, la mujer es capaz de hacer cualquier cosa para lograr conservar la vida y procurar el bienestar de su familia. Por ende, viene dotada de todas las habilidades, destrezas y saberes que requiere. Si no lo sabe, lo aprende, si no tiene, lo hace, si le falta, consigue....
ResponderEliminarNosotras las mujeres permitimos que se nos margine y se nos trate in-adecuadamente. Somos nosotras, las mujeres, las únicas que podemos poner fin a esto, dignificándonos, sintiéndonos y siendo merecedoras de lo mejor del mundo y marcando límites. Debemos respetarnos (tratarnos bien) a nosotras mismas para que otros nos respeten. Valorarnos para que otros nos valoren.